Europa - Decada años 50
001 Oloron
Suceso: Precipitación de cabello de ángel
Fecha: 17
de Octubre de 1952
Lugar: Oloron-Ste-Marie, País Vasco
Francés, Francia
Visión de los ovnis de Oloron-Ste-Marie, Francia, en octubre de 1952. |
Poco después del mediodía del 17 de octubre de 1952, el señor
Prigent, su mujer y sus hijos observaron una nube que tenía una forma muy
extraña; detrás había un objeto largo, cilíndrico y luminoso, que emitía
bocanadas de humo. A cierta distancia había unos treinta ovnis con una forma
parecida a la de Saturno: eran globos rojos rodeados por un anillo amarillos
que avanzaban en zig zag.
La visión dejó huellas físicas: largas estelas de cabellos
de ángel (unos filamentos que supuestamente cayeron de los ovnis, y que
parecían telarañas), que cubríeron árboles, casas y tendidos eléctricos de la
zona. Los análisis se han demostrado poco convincentes. Se ha sugerido que se
trata de una sustancia natural afectada de forma antinatural por ciertas
propiedades de los ovnis, posiblemente por la ionización del aire.
002 Avistamiento de la Isla Wolin
Suceso: Encuentro cercano de primer orden
Fecha: 31
de Julio de 1953
Lugar: Isla Wolin, Szczecin, Polonia
Uno de los primeros informes modernos sobre ovnis de Polonia
procede de la Isla Wolin. A las siete de la tarde del 31 de julio de 1953,
cinco policías polacos, junto con dos alemanes, vieron cómo un objeto con forma
de platillo aterrizaba cerca de las vías del tren. Al parecer, tenía una
anchura de entre 18 y 21 m, y a lo largo del borde tenía lo que parecían unas
portillas.
La visión duró sólo unos minutos; después, el objeto despegó
a una velocidad impresionante.
003 Las Fotografías de Stephen Darbishire
Suceso: Caso fotográfico
Fecha: 1 5
de Febrero de 1954
Lugar: Coniston, Cumbria, Inglaterra
Un año después de los celebrados encuentros de George
Adamski en California, en los que sacó varias fotos de una nave exploradora venusina,
Stephen Darbishire, un muchacho de trece años, fotografió una nave muy parecida
en Coniston, en el distrito de los Lagos.
Las principales dudas sobre la autenticidad de esas
fotografías reflejan las sospechas que rodeaban al propio caso Adamski; pero a
pesar de la enorme publicidad que este suceso obtuvo en aquella época, todavía
no se ha llegado a ninguna conclusión definitiva con respecto a la veracidad
del caso.
Dibujo de los Ovnis. |
Fotografía del Ovni. |
004 Encuentro de Wegierska Górka
Suceso: Abducción
Fecha: Julio
de 1954
Lugar: Wegierska Górka, Polonia
En 1986, en el curso de una conversación, la testigo de este
caso (omitimos el nombre) recordó de pronto un extraño suceso que había tenido
lugar cuando tenía once años, en julio de 1954.
Se encontraba de vacaciones en Wegierska Górka, y decidió ir
con sus amigos al bosque a buscar champiñones. Mientras paseaba cerca de un
acantilado, vio una luz brillante y de forma ovalada muy próxima al suelo.
Caminó hacia allí. Una figura salió de una puerta, se acercó a ella y la llevó
hacia el objeto de tal forma que ella no podía resistirse; subió por una
escalera y atravesó la puerta.
Dentro del objeto había otras cuatro figuras; tenían
estatura media y algunas características humanas, como el color de la piel y la
forma de las manos. Sin embargo, llevaban ropas muy ajustadas, estaban rodeados
por una especie de niebla, y en la espalda tenían algo parecido a una joroba.
Es muy interesante comparar esta descripción con la de la visión de Czluchów,
un caso que sucedió después del encuentro de Wegierska Górka, pero antes de la
narración de la protagonista. Sus ojos eran pequeños, no tenían nariz y la boca
era como una rendija. Le dijeron que se tumbara, y se quedó dormida.
Lo último que recordaba fue que sus amigos la encontraron
sentada cerca del acantilado. Había estado perdida durante siete horas. Ellos
tenían las cestas llenas de champiñones, mientras que la suya estaba vacía. Lo
único que recordaba era una vaga sensación de haber estado volando.
005
Encuentro de Dewilde
Suceso: Encuentro cercano de primer orden
Fecha: 10
de Septiembre de 1954
Lugar: Quarouble, Francia
Marius Dewilde y su familia en la escena del encuentro con
el ovni el 10 de septiembre de 1954, en Quarouble, Francia. Se pueden ver las
vías del tren sobre las que aterrizó el objeto. Dewilde no se sintió intimidado
por el encuentro y se dispuso a ofrecer resistencia, hasta que fue paralizado.
Lugar del suceso en Quarouble
Cuando unos extraños seres aparecieron en Quarouble,
Francia, tuvieron que darse cuenta de que su tecnología era superior. Y sin
duda la iban a necesitar, porque se encontraron con una de las respuestas más
tenaces que podían esperar por parte de un solo individuo.
Alertado por los ladridos de su perro, Marius Dewilde abrió
la puerta de su casa aproximadamente a las diez y media de la noche del 10 de
septiembre de 1954, y vio dos extraños humanoides a poca distancia de él.
Vestían lo que parecía un traje de buzo de una pieza, y llevaban la cabeza
cubierta por un enorme casco globular de vidrio. Eran bajos y muy robustos; el
testigo no recuerda haber visto sus brazos.
La reacción de Dewilde fue inmediata; intentó abalanzarse
sobre esos seres, pero un haz de luz procedente de un objeto situado cerca de
los raíles del tren le cegó. Al intentar moverse, descubrió que tenía las
piernas paralizadas.
Eso hubiera convencido a muchos hombres, pero Dewilde
todavía no había terminado. Después de haber sido sorprendido por la visita de
esos seres, después de no haber conseguido abalanzarse sobre ellos y de haber
sido paralizado por un haz de luz de su nave, en cuanto recuperó la movilidad
de sus miembros corrió detrás del ovni para intentar alcanzarlo. No llegó a
tiempo, porque ya había despegado.
Dewilde avisó a la policía, y los servicios de inteligencia
franceses se encargaron de la subsiguiente investigación. Tras examinar las
huellas que quedaron en el lugar del suceso, uno de los científicos indicó que
el objeto que se posó en el suelo debía de pesar por lo menos 35 toneladas.
006 Equivocación de Sinceny
Suceso: Ligera equivocación
Fecha: Octubre
de 1954
Lugar: Sinceny, Aisne, Francia
Vi una extraña silueta moviéndose a la luz de dos linternas,
y pensé que era un marciano que estaba arreglando su platillo volante. Fui a
buscar mi pistola y le disparé.
Una suposición perfectamente razonable, pero
desgraciadamente nada más lejos de la realidad. En este caso, el blanco resultó
ser el propio vecino del testigo, que estaba reparando el motor de su coche. Afortunadamente,
su puntería no era mejor que su sentido común, y el disparo sólo le dio al
coche, aunque seguramente el vecino se llevó un buen susto.
Nuestro testigo podría haber tenido muchos más problemas
todavía si para buscar una justificación hubiera dicho: «Lo siento. Pensé que
era usted otra persona...»
007 Encuentro del Teniente Saladin
Suceso: Encuentro cercano de primer orden
Fecha: 14
de Octubre de 1954
Lugar: Estuário del Támesis
El teniente James R. Salandin, de las Reales Fuerzas Aéreas,
Escuadrón 604 del Condado de Middlesex, despegó a las cuatro y cuarto de la
tarde de North Weald (Essex) en un avión de combate Meteor Mark 8.
El día estaba despejado y el cielo muy azul, y Salandin
podía ver la estela de los dos Meteor que formaban por encima de él. A 4.900 m
de altura, a medida que se acercaba al sur del estuario del Támesis, vio tres
objetos que se dirigían hacia él.
Al acercarse, un objeto dorado y otro plateado se colocaron
a su izquierda, y el tercero avanzó directamente hacia él, hasta el punto de
tocar su parabrisas. Lo describió como un platillo con un abultamiento arriba y
otro abajo. Salandin se sorprendió de la tremenda velocidad a la que había
estado viajando. Comunicó su experiencia a la base, y en cuanto aterrizó
redactó un informe para Derek Dempster, un oficial del servicio de inteligencia
que con el tiempo se convertiría en Ministro del Aire.
Acerca del suceso Salandin dijo que no había encontrado una
explicación satisfactoria para lo que había visto, pero que sabía lo que había
visto. Un poco antes había expresado una pequeña decepción: «Esa cosa estaba
justo delante de mí, pero la próxima vez estaré al acecho.»
008 La Flota de OVNIs
Suceso: Encuentro cercano de primer orden
Fecha: 6
de Noviembre de 1954
Lugar: Roma, Italia
El político italiano Alberto Perego fue uno de los cientos
de personas que, en octubre y noviembre de 1954, vio flotas de ovnis en los
cielos romanos. La más evidente de esas observaciones se produjo el 6 de
noviembre cuando apareció un montón de puntos blancos, que dejaba de vez en
cuando estelas de vapor. Se estimó que se movían a unos 1.300 km/h, y a una
altura de 6.900 m. A veces se agrupaban en formaciones con forma de diamante o
de V.
Durante el encuentro cayó una cantidad considerable de
cabello de ángel (filamentos que supuestamente caían de los ovnis y que en la
textura se parecían a telarañas) sobre los testigos, pero se evaporó a las
pocas horas.
El doctor Perego observó algo parecido el 12 de noviembre,
de nuevo junto con otro testigo; no tardó mucho en convertirse en un devoto de
las hipótesis extraterrestres y en contribuir con dinero a la investigación de
los platillos volantes.
009 Caso Fotográfico de Namur
Suceso: Caso fotográfico
Fecha: 5
de Junio de 1955
Lugar: Namur, Bélgica
Aproximadamente a las siete y media de la tarde, el señor
Muyldermans, cartero y fotógrafo aficionado, consiguió tomar tres fotografías
de un objeto en forma de disco que volaba muy bajo, cerca de Namur, Bélgica.
Un estudio meteorológico de las fotografías sugirió que la
altitud del objeto era de unos 1.500 m, y que el diámetro se acercaba a los 12
m. Aunque estas fotos eran bastante corrientes, comparadas con las que iban a
aparecer en los años siguientes, se hicieron muy famosas en todo el mundo. El
investigador alemán Gerald Mosbleck las utilizó partiendo de unas
falsificaciones suyas, para poner de manifiesto lo fácil que resultaba
falsificar ese tipo de fotografías, y para demostrar, muy correctamente, que
estas fotos, por sí solas, no podían constituir una prueba suficiente, a menos
que se contara con alguna otra evidencia sustancial.
010 Bentwaters/Lakenheath
Suceso: Encuentro visual y por radar
Fecha: 13
de Agosto de 1956
Lugar: Suffolk, Inglaterra
Durante la noche del 13 de agosto de 1956, los operadores de
radar de las Fuerzas Aéreas británicas y estadounidenses en Bentwaters
siguieron la pista de un ovni procedente del mar del Norte, a una distancia de
entre 40 y 48 km de la costa. Según el radar, viajaba a una velocidad
aproximada de 8.000 km/h, muchísimo más rápido que cualquier nave de la época.
El radar también siguió la trayectoria de otro grupo de blancos que se movía
hacia Bentwaters desde una distancia de unos 13 km, y a una velocidad, mucho
más razonable, de entre 130 y 200 km/h.
Se comprobó el funcionamiento del radar pero no se encontró
ninguna anormalidad; así, se desvió un interceptor T 33 del 512 Escuadrón de
Combate, que volvía a Bentwaters tras un vuelo de entrenamiento, para que
buscara confirmaciones visuales de los objetivos del radar. El avión no pudo
comprobar los hechos, puesto que, al no llevar un radar propio, estaba buscando
a ciegas.
Aproximadamente una hora más tarde, el radar informó de que
otro blanco se movía a una velocidad de entre 3.200 y 2.400 km/h. La torre de
control también vio este objeto, y lo describió como una luz brillante que
cruzaba el aire a una velocidad increíble. Al mismo tiempo, el piloto de una
nave de transporte C-47 informó de que detrás de él una luz brillante avanzaba
a la velocidad del rayo. Bentwaters hizo sonar la alarma.
Se avisó a las demás estaciones de radar de la zona; se
contactó con los puestos de mando de la Séptima División Aérea y de la Tercera
Fuerza Aérea; las fuerzas defensivas de la costa también participaron. En
Neatished, se envió un caza nocturno Havilland Venon para interceptar los objetos.
A medianoche, el piloto logró tomar contacto visual con el objeto, y poco
después también se confirmó el contacto por radar.
Se cree que se filmó una película. De hecho, el anterior
responsable del departamento del Ministerio de Defensa que estudia los ovnis,
Ralph Noyes (actualmente un activo investigador de ovnis), declaró que él vio
la película en aquella época, pero reconoce que se veía muy borrosa y no era
demasiado espectacular. No obstante, la corroboración del radar independiente y
los datos visuales sugieren que algo estaba ocurriendo aquella noche de 1956.
011 Encuentro de Angelu
Suceso: Encuentro cercano de primer orden
Fecha: Octubre
de 1958
Lugar: Figueras, Cataluña, España
Aproximadamente a las siete de la tarde, el señor Angelu,
que conducía su motocicleta cerca de Figueras, vio lo que parecía un objeto
estrellándose en un bosque cercano. Cuando se acercó para ayudar, comprobó que
no se había estrellado ningún avión, sino que había aterrizado un ovni, que tenía
la tradicional forma de platillo, una bóveda transparente y unas patas para
sostenerse. Su anchura era de aproximadamente 7,60 m.
El testigo vio dos seres extraños, enanos de cabeza grande,
que se movían alrededor de la nave y cogían muestras del terreno. A bordo del
platillo, en la bóveda, había un tercer personaje. El testigo estuvo observando
durante 15 minutos hasta que los extraños seres volvieron a embarcar y la nave
despegó rápidamente.
012 Recuperación de Väddö
Suceso: Recuperación de restos
Fecha: 9
de Noviembre de 1958
Lugar: Väddö, Roslagen, Suecia
Las huellas físicas de los ovnis son escasas y normalmente
se limitan a señales en el suelo, señales de quemaduras, etc. Sin embargo, de
vez en cuando se recuperan artefactos sólidos que supuestamente son parte de
algún ovni; de todas maneras, es preciso reconocer que todavía no se ha
recuperado ninguna sustancia que se haya confirmado como originariamente
extraterrestre.
El 9 de noviembre de 1958, dos testigos del aterrizaje de un
ovni cerca de Väddö, en Suecia, investigaron la zona en cuanto el objeto
desapareció, y recuperaron un pequeño artefacto metálico. Los análisis
indicaron que estaba compuesto por carburo de tungsteno, cobalto y titanio.
Según los testigos, cuando recogieron el objeto, poco
después de que el ovni despegara, estaba caliente.
013 Humanoide de Gdynia
Suceso: Encuentro cercano de primer orden
Fecha: 21
de Enero de 1959
Lugar: Puerto de Gdymia, Gdansk,
Polonia
Un número de dedos anormal, un traje de una sola pieza que
necesita tijeras para poder sacarlo, una extraña disposición de los órganos
internos y un sistema circulatorio en espiral. Éstas eran las conclusiones más
notables de un examen post mortem que se supone tuvo lugar en un hospital de
Gdynia, en cuya playa se encontró un humanoide.
Hay que advertir que la autenticidad de esta legendaria
historia es dudosa; aparece sin referencia en el libro de Arthur Shuttlewood,
El Platillo Volante, y también sin referencia en Ovnis en la Unión Soviética
(aunque en este artículo tenga fecha del 21 de febrero de 1959). Ninguno de
nuestros investigadores en Polonia fue capaz de obtener una evidencia
documental del supuesto suceso. Aparentemente, un ovni se estrelló en el puerto
de Gdynia y poco después se encontró un pequeño humanoide vagando por la playa
en estado de conmoción. Lo llevaron a una clínica; donde apreciaron que tenía
una cantidad anormal de dedos. El equipo del hospital intentó quitarle el traje
de una sola pieza que llevaba, pero como estaba hecho de un material
extremadamente duro hubo que utilizar unas tijeras para metal. También le
quitaron un brazalete de la muñeca, y quizá esto fue lo que adelantó su muerte,
poco después.
Un examen post mortem realizado en el Hospital de Gdynia
puso de manifiesto una extraña disposición de los órganos internos, así como un
sistema circulatorio en espiral alrededor del cuerpo. Según parece, el hospital
estaba perfectamente custodiado por guardias, y el cuerpo fue trasladado en un
vehículo refrigerado, bajo grandes medidas de seguridad. Todo parece indicar
que el destino del camión era un instituto de investigación de Moscú.
014 Los Seres Gelatinosos de Suecia
Suceso: Encuentro cercano de tercer orden
Fecha: 20
de Diciembre de 1959
Lugar: Domstein, Sur de Suecia
Cuando volvían de una fiesta, Stig Rydberg y Hans Gustavsson
se detuvieron a observar una luz que se veía en un claro cercano a la carretera
por donde circulaban. Vieron un objeto en forma de disco de unos 4,5 m, apoyado
sobre tres patas.
De improviso, fueron atacados por varias criaturas
diminutas, de aspecto gelatinoso, que intentaron arrastrarles hacia el
platillo. Ellos se resistieron, y uno de los dos amigos consiguió llegar al
coche y hacer sonar el claxon. En ese momento, dejaron libre al otro y las extrañas
criaturas emprendieron la huida.
Los testigos fueron sometidos a una regresión hipnótica que
confirmó su veracidad. Sin embargo, la investigación oficial adujo falta de
fiabilidad en los testigos.
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